Encima del señor cura
cuando la misa decía,
vi volar una paloma
y era la Virgen María.
Salga, señor cura, salga,
salga de la sacristía,
que está la nieve en la sierra,
las mozas se quedan frías.
Ya te pusieron el yugo
y te ataron la jamosta:
ya no te puedes marchar
aunque te pique la mosca.
(al salir de la iglesia)
Qué bueno estaba el carnero,
mejor aquí que paciendo,
mejor aquí que paciendo,
en el palacio y castillo;
mejor aquí, que paciendo
en los montes de Barrillos.
Esta sí, que se lleva la gala,
ésta sí, que las otras, nada,
ésta sí, que se lleva la flor,
ésta sí, que las otras, no,
Prendadita de su amor.
(en el banquete)
Entre los ajos y entre los puerros
sé yo de un nido de pájaros negros:
ya serán grandes, ya serán bellos,
ya serán pájaros volanderos.
Y entre los puerros y entre los ajos
sé yo de un nido de pájaros blancos:
ya serán grandes, ya serán bellos,
ya serán pajaritos volanderos.